Denuncia la insalubridad del recinto y ordena el traslado de canes La Diputación constata las carencias de la instalación
Las sospechas sobre el funcionamiento de la instalación, ubicada al pie del monte Serantes, no son nuevas en Santurtzi. El Ayuntamiento, de hecho, había recibido ya varias denuncias y avisos sobre la deficiente gestión de la perrera. La asociación Atea, promovedora de un trato ético hacia los animales, ha sido la última en exigir una investigación del problema tras comprobar el lamentable estado físico de algunos de los canes, que sobreviven «hacinados, muy delgados y con ciertas deformaciones en sus extremidades».
Técnicos municipales pudieron evidenciar los hechos denunciados a comienzos de este mes, cuando realizaron una inspección por sorpresa en las instalaciones. En su visita, los responsables advirtieron de la presencia de numerosos excrementos y vertidos de residuos orgánicos. Comprobaron, asimismo, el pésimo estado de la fosa séptica y la falta de un libro de registro de los animales alojados. Ante estos hechos, el Consistorio decidió incoar un expediente «por presunto maltrato y falta de condiciones higiénico-sanitarias».
El Ayuntamiento ha iniciado las acciones legales con el aval de la Diputación, que ha constatado también las deficiencias del centro canino en un informe veterinario. Aunque no se conoce con exactitud, el número de perros afectados es elevado. La instalación, no en vano, acoge a los canes abandonados de Santurtzi y a los de otras localidades cercanas como Portugalete o Bilbao.
Delito penal
Los propietarios de la perrera se exponen ahora a un posible delito penal, por el supuesto maltrato a los animales, y al expediente incoado por el Ayuntamiento. «O se corrige la situación de inmediato o nos veremos obligados a forzar el cierre», advierte el concejal de Urbanismo en Santurtzi, Ramón Vega, quien anuncia fuertes sanciones para los responsables de la instalación. «Impondremos las multas más elevadas que recoja la ley para servir de ejemplo y evitar futuros casos similares», sentencia el edil.
En mayo caduca, además, el servicio municipal de recogida de animales abandonados que hasta ahora prestaban «con normalidad» en Santurtzi, casualmente, los responsables de la perrera denunciada, que ayer no hicieron declaraciones. El Consistorio sacará a concurso un nuevo contrato por dos años.