Una familia de la localidad malagueña de Marbella que esperaba recibir el cuerpo de una mujer de 96 años emprenderá acciones legales para aclarar por qué un vuelo de Iberia trasladó hasta el aeropuerto de Málaga el cadáver de una gallega de 55 años.
Los parientes de la fallecida, Isabel Padilla, que residía desde hacía años en una población cercana a París, han comunicado los hechos a un abogado para tratar de esclarecer lo ocurrido, y aunque "no acusamos a nadie, se emprenderán acciones legales", dijo Ana Cuéllar, nieta de la difunta.El entierro de Isabel Padilla en el cementerio del núcleo marbellí de San Pedro de Alcántara estaba previsto para el pasado 8 de enero, día en el que familiares de la fallecida se desplazaron hasta el aeropuerto malagueño para recibir el ataúd, que viajaba desde París en un vuelo de Iberia que hizo escala en Barcelona, según publica hoy el diario SUR de Málaga.
Confusión de cadáveres
La hija de la fallecida comprobó que el cadáver del féretro no correspondía al de su madre, y tras unas horas de incertidumbre, la compañía aérea comunicó a la familia que el cuerpo de Isabel Padilla se encontraba en el aeropuerto de Santiago de Compostela y que hasta Málaga habían viajado los restos mortales de una mujer gallega.
El cadáver de Isabel Padilla llegó, finalmente, esa misma tarde en un vuelo vía Madrid, aunque no a tiempo para la hora del entierro, que tuvo ser retrasado hasta la mañana siguiente, según el periódico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario